miércoles, 1 de agosto de 2012

Esnov " Arte y Gastronomia"


¿?¿Esnov o Esnob?¿?

Esnob: el sentido moderno de la palabra para indicar el deseo de aparentar la pertenencia a una clase social superior se estableció a mediados del siglo XIX.
 Esnov adaptación en  Argentina de la palabra la cual genero mucho misterio solo una pagina web en negro y pocas palabras que definiera el evento “mezcla de Arte y Gastronomía”. En el evento fuimos enganchados los adeptos a la buena gastronomía, procedimos a la reserva online.  A fin mantener el misterio originado desde el primer día se procedió por parte de los organizadores enviar por correo electrónico los pasos a seguir, te deban a elegir el menú, colores preferidos si querías sentarte con extraño, etc.
Impacientes por la no llegada del mail de la incógnita del destino elegido, a última hora del día previo.
En algún ph de Palermo, el  recepcionista de baja estatura vestido de esmoquin más que agradable  nos recibió, luego de 30 minutos de espera, impacientes por la demora que tuvimos, nos pidieron disculpa, ya ingresando, nos ubicamos en una mesa de la planta baja. A todo esto llega un organizador y nos pregunta nuestros nombres, nos invita a pasar a nuestra mesa asignada.
Ya ubicados en el  primer piso en una especie de cuartito de poca calefacción, con algunos detalles poco agradables no pusimos a charlar con los comensales que nos acompañaban.
Aperitivo, cena?
Lamentablemente el aperitivo fue malo, al igual que el ingreso la demora fue  45 minutos, la entrada fue un insulto a la espera. Nos fuimos indignados y no supimos como siguió la velada.
Uno tiende a probar  experiencias nuevas en lugares disparatados en este caso la falta de organización, los camareros de poca experiencia y desinformados de lo que ocurría allí.
El misterio o estafa? lo vimos reflejado luego en el evento, apreciamos el fastidio humano por la falta de comida, la falta de calefacción y la poca colaboración de sentirnos alagados por el servicio brindado. Atento a este fallido trato en este tipo de evento poco habitual en mí, y de los comensales pedimos la devolución del dinero, lo que si agradezco supieron enmendar sus errores y atento a ello nos devolvieron el dinero.

Aparentar no es cuestión de actitud, solo el hecho de sentirlo y creerlo, poniendo tiempo, dedicación y ganas al proyecto para que el cliente se sienta satisfecho. Como dicen ya vendiste este evento ahora vende el próximo.
                                                                                                  
        Leo Romero